Iluminación Jardin

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Ilumina tu jardín con soluciones adaptadas a cada zona. Las balizas guían los pasos, las guirnaldas crean ambiente y los focos resaltan plantas o fachadas. Elige el grado de protección adecuado: IP44 para zonas cubiertas, IP65–67 en áreas expuestas a lluvia y salpicaduras, e IP68 en elementos sumergidos.
Si buscas instalaciones rápidas, la iluminación solar evita obras y cableado; para uso intensivo, la red (230 V) o la baja tensión 12 V ofrece más potencia y estabilidad. Ajusta la temperatura de color según el efecto: 2700–3000 K para luz cálida y acogedora; 4000 K para pasos y zonas de trabajo.
Revisa lúmenes y altura de montaje para evitar deslumbramientos y añade sensores o temporizadores para ahorrar energía. Combina varios puntos de luz para conseguir rutas seguras, zonas de estar confortables y un jardín que funciona de día y de noche.

Preguntas frecuentes

¿Qué IP necesito para exterior?

En porches o zonas cubiertas, IP44 es suficiente. En áreas expuestas a lluvia o riego, prioriza IP65–67. Para luminarias sumergidas (estanque o piscina), exige IP68 y, cerca de agua, apuesta por baja tensión (12 V) siguiendo la normativa de seguridad.

¿Cuántos lúmenes y temperatura de color elegir?

Para caminos, 100–200 lm por baliza suelen aportar guía sin deslumbrar. En zonas de estar, 2700–3000 K generan ambiente cálido; para seguridad o trabajo, 4000 K aporta mayor definición. En acentos vegetales, 200–400 lm por foco es una base orientativa.

¿Solar o 230 V para mi jardín?

La solución solar es rápida y sin cableado, ideal para decoración y puntos con buena insolación. La red (230 V) o 12 V rinde mejor en uso diario, potencia y fiabilidad. Lo óptimo suele ser combinar: solar para ambiente y 230/12 V en zonas de paso o trabajo.