Colección: Grapadoras

29 productos

Estas herramientas —también llamadas pistolas de grapas o tackers— ofrecen la potencia necesaria para unir madera, tela, láminas aislantes o conductos eléctricos de forma rápida y segura. En esta categoría encontrarás modelos manuales, eléctricos, neumáticos y de martillo, junto con grapas y clavos compatibles para cada aplicación.

Tipos de grapadora y sus usos más comunes

  • Grapadora manual
     Funciona con resorte y palanca. Es ligera y portátil, ideal para tapizar sillas, fijar láminas de plástico o instalar zócalos de madera blanda.

  • Grapadora eléctrica o a batería
     Reduce el esfuerzo y dispara grapas de forma constante. Muy útil en montajes prolongados de paneles acústicos, listones finos o trabajos de bricolaje doméstico.

  • Grapadora neumática
     Conectada a un compresor de aire, logra altas cadencias y gran profundidad de clavado. Recomendable para carpintería, montaje de tarimas o fabricación de embalajes.

  • Grapadora de martillo (hammer tacker)
     Se empuña como un martillo y suelta la grapa al golpear. Perfecta para grapar fieltro asfáltico, aislamientos o mallas sobre grandes superficies.

  • Clavadora combinada (staple & brad nailer)
    Acepta grapas estrechas y pequeños clavos tipo brad. Ahorra espacio en el taller y amplía el rango de fijaciones en molduras y remates.

Grapas y clavos: tamaños y materiales

Código habitual

Ancho de corona

Largo (mm)

Material más común

Aplicación típica

Tipo 53

11,3 mm

6–14

Acero galvanizado

Tapicería, láminas finas

Tipo 140

10,6 mm

6–16

Acero galvanizado/inox

Paneles, rodapiés

Tipo 500

6,1 mm

10–25

Acero endurecido

Ensambles madera-madera

Brad 18 Ga

15–50

Acero sin cabeza

Molduras, junquillos

Grapa cable

6–8 mm

10–14

Acero + aislante plástico

Fijar cables bajos voltios

Consejo práctico: elige grapas de acero inoxidable en exteriores o zonas húmedas para evitar la oxidación y las estrías negras sobre la pintura.

Cómo seleccionar la grapadora adecuada

  1. Material a fijar

    • Madera blanda y telas: bastará una grapadora manual tipo 53.

    • Tableros duros o maderas gruesas: opta por un modelo neumático o eléctrico con grapas de 14 mm o más.

  2. Frecuencia de uso
     Si dispararás cientos de grapas al día, la versión neumática reduce fatiga y aumenta la velocidad.

  3. Profundidad de clavado ajustable
     Imprescindible para evitar que la grapa atraviese material blando o quede sobresaliente en soportes duros.

  4. Carga y mantenimiento
     Sistemas “quick load” ahorran tiempo en obra; los mecanismos antiatasco reducen interrupciones.

  5. Ergonomía y seguridad
    Empuñaduras engomadas, gatillo con seguro y cuerpo de magnesio ligero mejoran el confort y previenen accidentes.

Mantenimiento y cuidados

  • Limpieza diaria: retira polvo y restos con aire comprimido o un pincel suave.

  • Lubricación: aplica dos gotas de aceite neumático en la entrada de aire antes de cada jornada (solo modelos de aire).

  • Revisión de muelle y pestillo: evita atascos y disparos dobles.

  • Almacenaje: guarda la herramienta descargada, con el gatillo bloqueado y en su maletín para protegerla de golpes y humedad.

  • Grapas adecuadas: usar un largo excesivo fuerza el mecanismo y acorta la vida del pistón.

Explora nuestro catálogo de grapadoras profesionales y accesorios para garantizar fijaciones firmes, rápidas y duraderas en cualquier entorno — desde el taller de tapicería hasta la obra más exigente.